Franz Anton Beckenbauer, conocido mundialmente como "El Kaiser", nació el 11 de septiembre de 1945 en Múnich, Alemania. Desde temprana edad, mostró un talento excepcional para el fútbol, ingresando a las categorías juveniles del SC 1906 Munich (que es un club deportivo del distrito de Obergiesing en Munich) antes de unirse al Bayern de Múnich en 1959.
Beckenbauer debutó profesionalmente con el Bayern de Múnich en 1964, y rápidamente se destacó por su elegancia y visión de juego. Originalmente centrocampista, Beckenbauer fue pionero en el rol de "libero" o defensa libre, una posición desde la cual podía orquestar el juego defensivo y ofensivo. Durante su estancia en el Bayern, ganó numerosos títulos nacionales e internacionales, incluidos cuatro campeonatos de la Bundesliga y tres Copas de Europa consecutivas (1974, 1975, 1976).
En 1977, Beckenbauer se trasladó a los Estados Unidos para jugar con el New York Cosmos en la NASL, contribuyendo significativamente a la popularización del fútbol en ese país. Regresó a Alemania en 1980 para jugar con el Hamburgo, con el que ganó la Bundesliga en 1982. Finalizó su carrera como jugador con una última temporada en el Cosmos en 1983.
Beckenbauer fue una figura clave en la selección de Alemania Occidental. Debutó en 1965 y jugó en tres Copas del Mundo. Fue subcampeón en 1966 y capitaneó a su equipo a la victoria en 1974, consolidando su estatus como uno de los mejores jugadores de todos los tiempos. También ganó la Eurocopa en 1972 y fue subcampeón en 1976.
Tras retirarse como jugador, Beckenbauer se convirtió en entrenador. Dirigió a Alemania Occidental desde 1984 hasta 1990, logrando el título de la Copa del Mundo en 1990, convirtiéndose en una de las pocas personas en ganar el torneo tanto como jugador como entrenador. Posteriormente, entrenó al Olympique de Marsella y al Bayern de Múnich, obteniendo más títulos y afianzando su reputación como uno de los grandes estrategas del fútbol.
Beckenbauer ha sido ampliamente reconocido por sus contribuciones al fútbol. Ganó el Balón de Oro en 1972 y 1976, y fue incluido en la lista FIFA 100 de los mejores jugadores vivos de la historia, compilada por Pelé. Su apodo, "El Kaiser", refleja no solo su dominio en el campo, sino también su carisma y liderazgo. En 2006, jugó un papel fundamental en la organización de la Copa del Mundo en Alemania, evento que fue considerado un éxito rotundo y contribuyó aún más a su legado en el fútbol mundial.
Franz Beckenbauer es recordado como uno de los más grandes futbolistas y entrenadores de la historia. Su influencia va más allá de sus logros en el campo, habiendo cambiado la forma en que se juega y se gestiona el fútbol. Su vida y carrera siguen siendo un ejemplo de excelencia, innovación y dedicación al deporte.