La teoría de la agenda setting fue propuesta por los investigadores estadounidenses Maxwell McCombs y Donald Shaw en 1972. Su trabajo pionero, titulado "The Agenda-Setting Function of Mass Media", fue publicado tras un estudio sobre las elecciones presidenciales de 1968 en Estados Unidos.
McCombs y Shaw investigaron cómo los temas destacados por los medios influían en las
preocupaciones del público durante la campaña electoral. Para ello, analizaron la cobertura
mediática y compararon los temas más mencionados en los medios con las respuestas de los
votantes sobre qué cuestiones consideraban más importantes.
Su hallazgo fue claro: había una
fuerte correlación entre la agenda de los medios y la agenda del público.
Este estudio marcó el inicio formal de la teoría de la agenda setting, sentando las bases para
décadas de investigaciones posteriores en el campo de la comunicación y el periodismo.
La teoría de la Agenda-Configuración explica cómo nuestra percepción de la realidad está formada en gran medida por lo que leemos, vemos y escuchamos. Desde las noticias diarias hasta los discursos políticos, los medios de comunicación desempeñan un papel crucial en la información al público y la formación de la opinión pública. En medio de este flujo constante de información, los medios de comunicación deciden qué historias cubrir y cómo cubrirlas. Así, las consecuencias de estas decisiones afectan nuestra comprensión del mundo.
Según la agenda setting, los medios de comunicación influyen en la percepción de la realidad de las personas, estableciendo cuáles temas o noticias son consideradas importantes dentro de una sociedad. La idea central es que los medios no dicen directamente qué pensar, pero sí logran influir en sobre qué pensar. Esto ocurre al dar mayor cobertura, énfasis o repetición a ciertos temas, lo que los posiciona como prioritarios en la opinión pública.
Selección de temas:
Los medios de comunicación eligen qué noticias o temas destacar, y esta
selección determina en gran medida la agenda pública.
Jerarquización de contenidos:
Los temas más repetidos o presentados de forma prominente (en
titulares, primeras páginas, horarios principales) son percibidos como más relevantes por la
audiencia.
Interacción con la sociedad:
La agenda mediática influye en la agenda pública (lo que la gente
discute), pero también puede ser retroalimentada por las preocupaciones del público o por
intereses políticos, económicos o sociales.
Efecto acumulativo:
Con el tiempo, la repetición de ciertos temas puede moldear las prioridades
de una sociedad y su percepción del mundo.
Framing y Priming son conceptos relacionados con la agenda setting, pero abordan diferentes formas en las que los medios de comunicación y otros agentes de información influyen en la percepción pública.
El framing se refiere a cómo los medios presentan o estructuran la información, moldeando la
manera en que las personas entienden un tema o problema. Es decir, no solo eligen qué temas
destacar, sino también cómo interpretarlos.
Claves del framing:
Se enfoca en el ángulo, contexto o perspectiva desde la cual se aborda un tema.
Utiliza palabras específicas, metáforas, imágenes o énfasis para resaltar ciertos aspectos
mientras se minimizan otros.
Afecta las emociones y el juicio del público, influyendo en la forma en que se perciben las
causas, soluciones y responsabilidades de un problema.
Ejemplo de framing:
Una protesta puede enmarcarse como:
“Manifestación pacífica por los derechos humanos” (positivo).
“Disturbios violentos que afectan la economía local” (negativo).
El priming se refiere a la manera en que los medios preparan a la audiencia para evaluar un
tema o una figura basándose en los criterios que ellos destacan repetidamente. Este concepto
está relacionado con la activación de ideas o juicios previos en la memoria del público.
Claves del priming:
Funciona como una preparación mental que guía el enfoque del público hacia ciertos aspectos
al evaluar un tema.
Surge de la exposición repetitiva a ciertos temas, imágenes o conceptos, que se vuelven más
accesibles en la memoria.
Es útil en política, publicidad y branding, porque influye en los criterios con los que la
gente juzga candidatos, productos o eventos.
Ejemplo de priming:
Antes de una elección, si los medios constantemente destacan temas de seguridad, es probable
que los votantes evalúen a los candidatos principalmente según sus posturas sobre seguridad,
dejando otros aspectos (economía, educación) en segundo plano.
Framing moldea la forma en que entendemos un tema al definir cómo se presenta.
Priming afecta los criterios que utilizamos para evaluar un tema al dar prioridad a ciertos
aspectos repetidamente.
Ambos conceptos trabajan de forma complementaria con el agenda setting para influir en la
percepción pública y la toma de decisiones.